Aneval reclama un control digital de acceso a Madrid Central

Nuevo debate abierto en Madrid, tras las declaraciones de las cinco grandes del rent a car que abogan por un control digital de acceso a Madrid Central.

Aneval reclama un control digital de acceso a Madrid Central

El Plan de Calidad del Aire y Cambio Climático de la Ciudad de Madrid (en adelante Plan A) se conforma como una herramienta de ámbito local dirigida a reducir la contaminación atmosférica, contribuir a la prevención del cambio climático y definir estrategias de adaptación. El objetivo principal es garantizar la calidad del aire que respiran los madrileños y fortalecer la ciudad frente a futuros impactos climáticos.

Pero mientras se mantiene aún la incógnita de quién regirá a partir de ahora el Ayuntamiento y por ende el PLAN A, La asociación de empresas de alquiler de coches ANEVAL prepara su tan perseguida petición de transformación hacia un sistema de control telemático de los autos y prescindir del sistema de pegatina o etiqueta en el parabrisas.

Control digital de acceso a Madrid Central

La cuestión que plantea Aneval es que filtrar el tráfico de acuerdo a una etiqueta física resulta anacrónico en un contexto de transformación digital. Argumentan su petición en que el uso de las pegatinas de plástico para la elaboración de las etiquetas es poco ecológico y le suman a la ecuación una merma por mala impresión del 5% y la tardanza de 2 dias en llegar la pegatina desde la solicitud. 

La fórmula de la pegatina le ha salido cara al rent a car

Aneval hace sus cálculos basándose en una flota de 500.000 vehículos parados durante un millón de días (dos días por vehículo). Según nos explican, esto repercute en dejar de ingresar más de un millón de euros. 

El cálculo sobre 500.000 de automóviles se basa en que, según dicen, la flota de rent a car es dinámica y susceptible de circular por Madrid en algún momento de su vida aunque esté por ejemplo el las islas Canarias…

El síndrome de la pegatina perseguidora

Pero la consecuencia más sorprendente de la noticia es el llamado “síndrome de la pegatina perseguidora”. Este fenómeno se produce porque a menudo ocurre que el coche ya ha salido a otro destino cuando la etiqueta llega. Sin más nos resulta muy divertida la imagen mental de una pegatina persiguiendo a un coche.

Por una ciudad libre de emisiones.

Para finalizar y a pesar de las incoherencias, síndromes y demás dramas que surgen por la implementación de una nueva normativa, lo importante ahora es trata sobretodo de mantener el compromiso para tener lo antes posible un Madrid menos contaminado. Nuestra sugerencia es que sirvamos unas copas de paciencia y brindemos por tener en breve ciudades libres de emisiones.

Autor: Juli Burriel