Previsiones Business Travel: Crecimiento por encima del 50% hasta 2023

La consultora BRAINTRUST ha hecho público un nuevo estudio analizando las previsiones de crecimiento de los viajes de empresa. Unas expectativas muy positivas aunque la recuperación total de los niveles de negocio prepandémicos no se espera hasta 2030.

Llega un business travel más consciente y responsable, cuyo papel se amplifica ante la necesidad de viajar para seguir haciendo negocios, creciendo de forma rápida en los próximos dos años, mientras se prepara para una nueva transformación hacia la sostenibilidad. Todo ello con un nuevo y más importante rol de las agencias especializadas. Así describe el estudio de BRAINTRUST la recuperación de los viajes de negocios.

Buenos ritmos de crecimiento


El barómetro elaborado por BRAINTRUST afirma que el este año 2021 se llegaría a un 52% del volumen de 2019, con un repunte importante en 2022 y 2023 hasta llegar al 83%, para posteriormente auparse hasta los niveles pre-COVID en los 2 siguientes años, y seguir creciendo a niveles ya mucho más moderados ante la pujanza de la sostenibilidad que caracterizará a toda la industria del turismo.

En este sentido, el estudio apunta diferentes impactos, positivos y negativos, que influirán en el comportamiento del sector durante los próximos años. En el bando de los impactos positivos encontramos:

  • El buen ritmo de vacunación de los países occidentales emisores de business travel y la puesta en marcha del certificado verde digital en Europa.
  • Una economía más globalizada y colaborativa entre empresas grandes y pequeñas (y autónomos).
  • Nuevas motivaciones de viaje. El ejemplo más claro son las reuniones que agruparán periódicamente a los empleados en remoto; o la celebración de más eventos estratégicos que reunirán mucho más frecuentemente a un menor número de personas.
  • Proyectos y alianzas globales con un mayor intercambio de personas en proyectos internacionales.
  • Auge del segmento bleisure debido a las nuevas generaciones de viajeros acostumbrados a combinar trabajo y ocio.
  • Surgir de nuevas economías: economía verde, economía digital o economía circular.

Impactos negativos de futuro en el business travel

El informe también enumera diferentes condicionantes que pueden impactar negativamente en el sector:

  • Durante 2022 y 2023 permanecerá un escenario de volatilidad e inseguridad sanitaria que afectará especialmente a los viajes de largo radio, en países aún sin inmunidad de grupo.
  • Potencial aparición de nuevas variantes del coronavirus, que ralentizarían la recuperación en regiones del planeta, si las vacunas no cubren su actuación.
  • El teletrabajo se quedará para siempre. Y su influencia reducirá de forma notable los viajes de proximidad. En este sentido, las herramientas digitales han acelerado las comunicaciones híbrido-presenciales. Ello también suprimirá una parte de los viajes no esenciales de reuniones internas a destinos cercanos.
  • Desaparición de un tejido empresarial dañado por la crisis una vez acaben las ayudas públicas, especialmente PYMES y autónomos.
  • Llegada de una nueva generación de viajeros con el “work life balance” en su ADN, donde los millenials y los Z’s son mayoría, y donde los baby boomers, más acostumbrados a viajar por trabajo, se retiran del escenario laboral.
  • Los Objetivos de Desarrollo Sostenible incluidos en la agenda 2030 favorecerán la cultura de unas empresas más respetuosas y unos viajeros más responsables, con políticas más restrictivas que afectarán a los desplazamientos en los próximos años.

Menos corto radio y más larga distancia

El cuidado del planeta, ante un deterioro compulsivo en los últimos años, será una necesidad más que una prioridad. El cumplimiento de los ODS y la Agenda 2030 afectarán de lleno a los viajes de negocios, que pueden ser sustituidos por comunicaciones digitales para reducir los gases invernadero.

BRAINTRUST cree que “este es un camino irreversible, invitando a las empresas a reforzar sus estrategias de Responsabilidad Social Corporativa, ya no sólo compensando el impacto, sino eliminando de sus políticas los viajes innecesarios ahora llamados no esenciales.”
Según esta consultora, estas nuevas políticas podrían reducir la huella medioambiental de los viajes de corto radio entre un 20% y un 30%, entre los cuales se hallan una buena parte de todos los viajes domésticos y europeos.
La cuestión que aún estaría por ver es el nivel de adherencia a los ODS por parte de algunos de los mayores países emisores de viajeros de negocio como China, Estados Unidos o India, que por otra parte son los que mayores emisiones contaminantes producen en el mundo.

Por otro lado, el estudio augura un “crecimiento sostenido en los viajes de larga distancia, a los que se dará más relevancia por la oportunidad que pueden significar – incluso aunque haya una relocalización de suministros – pero donde se tratará de ampliar la cartera de clientes en un mundo global post pandemia”.

También apunta a un desplome de los viajes de avión por debajo de dos horas y media en la próxima década, ante la posibilidad de tener alternativas más ecológicas y el gravamen que se avecina para los medios de transporte.

Las agencias Business Travel, actores imprescindibles

Ante un entorno incierto donde la seguridad de los viajeros, la eficiencia en el gasto y el cuidado del planeta son esenciales, BRAINTRUST presagia un auge de las agencias de viajes especializadas en Business Travel. Se convertirán en el actor requerido por las empresas que quieran viajar con garantías gracias a su conocimiento, experiencia y herramientas, con las mejores opciones integradas y automatizadas.

El estudio también avisa que “en los próximos años podría verse de nuevo una lucha encarnizada entre los diferentes proveedores, ávidos de recuperar los ingresos perdidos durante la pandemia, por hacerse con la venta directa fomentando la desintermediación.”

Sin embargo, organizar viajes de negocio será mucho más complejo en el futuro, lo que augura un incremento de la intermediación llegando las agencias a hacerse con una cuota cercana al 60%, en detrimento del canal directo, convirtiendo el business travel actual en un negocio de movilidad y comunicación corporativa.
Mientras tanto las líneas aéreas o las cadenas hoteleras deberán reflexionar sobre sus modelos de negocio, donde el sector corporativo suponía una pequeña parte de su cuota total de viajeros, pero una gran parte de sus ingresos.

Para José Manuel Brell, Co-Director del Barómetro Turístico y Socio responsable de la práctica de Estudios y Modelos Cuantitativos en BRAINTRUST, “el business travel ha cambiado para siempre su fisonomía, y esto va a significar grandes oportunidades para aquellos actores de la industria que sepan anticiparse a los nuevos tiempos”.