Seguridad en viajes corporativos y desplazados ante el COVID-19

La difusión de información precisa y una buena gestión de solicitudes de soporte serán fundamentales para afrontar las afectaciones de este virus.

¿Qué puede significar el brote de COVID-19 para los equipos de operaciones de seguridad en las corporaciones?

coronavirus covid 19No hay duda de que los efectos del brote de COVID-19 en las organizaciones y economías globales continuarán siendo de largo alcance y significativos. El impacto específico de las operaciones de seguridad depende en gran medida de la naturaleza del negocio principal de una organización. Normalmente, cualquier crisis es coordinada en gran medida por el equipo de seguridad de una organización. Por lo tanto, es lógico pensar que se requerirá seguridad para gestionar la demanda de inteligencia por parte de las distintas partes interesadas dentro de una organización.

En cualquier caso, la difusión proactiva de la información y la gestión efectiva de las solicitudes de soporte es increíblemente importante. Y la ejecución de estos elementos de manera oportuna es fundamental para el cumplimiento de las obligaciones del duty of care.

Con respecto a la planificación de la continuidad del funcionamiento de las corporaciones, la seguridad debería llevar a cabo una evaluación exhaustiva del riesgo para las personas, analizando los lugares y las operaciones críticas para el negocio que puedan verse afectados por el brote.

Si bien la seguridad es (y debería ser) la prioridad número uno, también es vital la integridad empresarial. Hoy en día, la mayoría de las empresas cuentan con un sólido programa de gestión de crisis y continuidad comercial (BCP). Una revisión exhaustiva de todos los aspectos de tales programas es importante. En pocas palabras: nunca es un buen momento para pasar por alto parte de un BCP establecido. Pero durante una crisis de salud global es un momento particularmente malo para tal ocurrencia. 

¿Qué deberían hacer los equipos de seguridad para sacar a sus empleados del peligro?

Para las organizaciones que tienen grandes poblaciones de empleados en China o tienen viajeros (incluidos los expatriados) en regiones afectadas, la seguridad será una alta prioridad además de la salud y el bienestar general. Aquellos que ya han identificado alguna exposición al virus probablemente verán si los activos pueden o deben moverse debido a las actuales restricciones de viaje.

Si no es posible viajar, la estrategia a seguir es la de «refugio en el lugar» y establecer planes sobre cómo apoyar a los empleados durante este tiempo. Si el equipo de seguridad puede coordinar los viajes en adelante, deberán planificarse consideraciones de cuarentena, ya sean opcionales o impuestas por las autoridades. Además, debe existir un plan para gestionar la interacción con los empleados potencialmente expuestos. En este caso, se requerirá una consulta con los departamentos legales y de recursos humanos.

Si un individuo está enfermo y existe la posibilidad de que haya estado expuesto al virus, será necesario coordinar la gestión de su tratamiento. Dado que cualquier escenario es posible a medida que avanza este brote, la gestión eficaz de la situación requerirá la participación de muchas partes interesadas diferentes y socios externos. Además, será necesario realizar comunicados- cuidadosamente elaborados- sobre el tema, tanto a nivel externo como interno.

Es importante que el equipo de seguridad y otras partes interesadas dentro de la empresa se encarguen de mantenerse actualizados sobre la progresión de esta situación.

En este enlace puede encontrar información más detallada sobre el brote de coronavirus del Director Médico Global de HX, Dr. Adrian Hyzler.

Además, la Organización Mundial de la Salud realiza informes diarios sobre la evolución del brote COVID-19 y su afectación por países que pueden seguirse en este enlace: https://www.who.int/emergencies/diseases/novel-coronavirus-2019/situation-reports

 

Tres recomendaciones para empresas ante el COVID-19

1. Restringir los viajes. Revisar todos los planes de viaje a zonas afectadas haciendo uso de las instalaciones de conferencias remotas electrónicas siempre que sea posible.

2. Trabajo remoto. Establecer planes de trabajo para que empleados y viajeros en zonas afectadas, en la medida de lo posible, trabajen desde casa para reducir el uso del transporte público y la probabilidad de entrar en contacto con multitudes de personas.

3. Revisar la política de vacunación. Hay que informar a los empleados sobre los beneficios de la vacuna contra la gripe estacional para ayudar a prevenir la infección con la gripe, cuyos síntomas pueden confundirse con el nuevo coronavirus. Esto también ayudará a proteger contra el virus de la gripe que mata a medio millón de personas anualmente.

El equipo de seguridad, en asociación con cualquier profesional médico del personal, también puede enviar consejos generales a la organización sobre las mejores prácticas para evitar la transmisión del coronavirus, así como otras enfermedades.
Estas prácticas incluyen:

  • Lavarse las manos regularmente con agua y jabón (durante al menos 20 segundos) o con un desinfectante para manos a base de alcohol, especialmente después de toser y estornudar y antes de manipular y consumir alimentos.
  • Al toser y estornudar, usar pañuelos desechables y deshágase de ellos con cuidado y rapidez.
  • Evitar el contacto cercano con personas que parecen no estar bien o que están tosiendo o estornudando y evite compartir artículos personales.
  • Evitar el contacto sin protección con animales de granja salvajes o domésticos (vivos o muertos).
  • Cocinar bien toda la carne y los huevos antes de consumirlos.

¿Qué es el coronavirus?

El brote de COVID-19 es un virus de la familia coronavirus que se originó en Wuhan, la capital de la provincia de Hubei, en el centro de China. Los primeros casos fueron reportados en diciembre y no existe vacuna.
La familia de los coronavirus incluye el resfriado común y los virus que causan enfermedades más graves, como el MERS o el SARS. Este último también se extendió desde China a más de una docena de países entre 2002 y 2003, matando aproximadamente a 800 personas.
El COVID-19 infecta los pulmones y los síntomas comienzan con fiebre y tos. Puede evolucionar añadiendo dolencias como falta de aliento y dificultades respiratorias que pueden complicarse en neumonías.

 

Autor:
Javier Ruz Bentué
Corporate Commercial Manager
Healix Spain