El COVID-19 provoca la pérdida de 6.000 rutas desde aeropuertos europeos
Airport Council International Europe (ACI) ha publicado su informe anual de conectividad aeroportuaria. Y las conclusiones confirman el duro golpe que ha supuesto la pandemia de la COVID-19 para la industria aérea: más de 6.000 rutas operadas desde aeropuertos europeos todavía no se han restaurado nueves meses después del inicio de la pandemia.
A diferencia de otros informes que analizan el volumen de pasajeros, el estudio de ACI mide el grado en que los aeropuertos europeos están conectados y son accesibles desde el resto de nuestro continente y el mundo, utilizando un conjunto de índices de conectividad directa, indirecta y hub.
Conectividad directa y HUB
En lo que a conectividad directa se refiere (hasta septiembre), el mayor descenso se produjo en Madrid-Barajas (-71%), Roma-Fiumicino (-70%), Barcelona (-70%), Múnich (-68%), Londres-Heathrow (-68%) y Frankfurt (-67%). Los aeropuertos regionales todavía registraron mayores descensos. Es el caso de Linz (-96%), Treviso (-95%), Vaasa (-91%) o Quimper (-87%). A nivel europeo, la conectividad europea ha descendido un 57% respecto a septiembre de 2019.
Los aeropuertos de Rusia y Turquía han soportado mejor la crisis, debido tanto al tamaño como a la dinámica relativa de su mercado nacional. Por ello, sus pérdidas en conectividad directa han sido menores: Moscú-Domodedovo (-12%), San Petersburgo (-26%), Moscú-Vnukovo (-28%) y Estambul-Sabiha Gökçen (-33%).
La conectividad de hub todavía ha registrado peores cifras que la conectividad directa, ya que los 6 principales aeropuertos hub solo han recuperado el 16% de su capacidad de distribución de tráfico aéreo hasta septiembre. Munich (-93%) y Londres-Heathrow (-92%) registraron las mayores pérdidas en conectividad hub, seguidas de Frankfurt (-89%), Estambul (-85%), París-CDG (-81%) y Amsterdam-Schiphol (-70%).
Por otro lado, las conexiones directas entre Europa y el resto de regiones del planeta también han sufrido importantes impactos. En concreto, -80% con Norte América, -78% con Asia-Pacífico, -77% con Latinoamérica, -70% con Oriente Medio y -67% con África.
Según Olivier Jankovec, Director General de ACI EUROPE, “el daño es tan sistémico que depender únicamente de las fuerzas del mercado para restaurar la conectividad aérea no sería realista. La UE y los gobiernos de toda Europa deben intervenir urgentemente para ayudar a ponerlo en marcha. Necesitamos un marco de recuperación para la aviación que incluya ‘Esquemas de reinicio de conectividad aérea’ similar al visto en Chipre, con contribuciones financieras temporales destinadas a apoyar el reinicio de las rutas aéreas de forma no discriminatoria «.
Jankovec también añadió que “con cada aumento del 10% en la conectividad aérea directa se genera un aumento del 0,5% en el PIB per cápita. No reconstruiremos y recuperaremos sin restaurar la conectividad aérea”.