Cómo puede afectar viajar a la salud

¿Cómo puede afectar viajar a la salud? El Business Travel no es una práctica de riesgo pero puede llegar a tener efecto para la salud. Sobretodo cuando hablamos de viajeros frecuentes. Conoce algunos de los síntomas que pueden producir los viajes de negocio y las claves para combatirlos es el motivo de este artículo

Si gestionas a viajeros frecuentes que la mayor parte del tiempo lo pasan en un avión, seguro que más de una vez has pensado que el ir y venir constante les está pasando factura. Y así es. La realidad es que la dosis de estrés y la inestabilidad en la rutina de los viajes de negocio pueden generar efectos que se dividen en tres grandes grupos: fisiológicos, psicológicos y sociales.

Problemas fisiológicos

En primer lugar encontramos los problemas fisiológicos que son los relacionados con el jet lag. Frecuentemente esta descompensación horaria es la culpable de trastornos del sueño u otros efectos conocidos como el “envejecimiento prematuro”. Para prevenir estos efectos puedes empezar a adaptarte al nuevo horario una semana antes del viaje. Dormir bien la noche anterior al vuelo es muy importante, pero también es recomendable no beber alcohol ni bebidas con cafeína y mantenerse bien hidratado. Los desajustes que genera comer fuera de casa también se encuentran en este grupo y por ello es importante intentar, tanto como se pueda, comer sano.

Efectos psicológicos

En segundo lugar encontramos los efectos psicológicos y emocionales. Éstos son los menos evidentes, pero no menos importantes. Aquí se encuentra “la desorientación del viajero”, resultado de cambiar constantemente de lugar y zona horaria. Además, el viaje en sí ya es una fuente de estrés: prepararte la maleta, las prisas, esperarte en el aeropuerto y el añadido de tener que combatir con imprevistos como pueden ser los retrasos o las cancelaciones. Asimismo, en este grupo también se encuentran otros factores como la acumulación de trabajo cuando regresas a tu puesto o la soledad de viajar.

¿Y cómo combatimos estos síntomas?

La planificación es el mejor aliado. Organiza tu tiempo con una lista de tareas y tiempos previstos. Pero cuidado, es importante que no te satures; siempre es bueno tener un margen por si surge algún imprevisto como atascos en el tráfico o alguna comida inesperada, que puede ser una oportunidad futura de negocio. Además, recuerda que comprobar toda la documentación antes del viaje en regla es fundamental.

Conciliar trabajo y familia es aún más costoso cuando existe la obligación de viajar asiduamente. Para combatirlo la comunicación con tu familia es indispensable antes, durante y después del viaje.

efectos sociales

Y por último se producen los efectos sociales que afectan también a familiares y amigos del viajero. La distancia, la soledad y la carga de responsabilidades que asume el otro miembro de la pareja que se queda en casa pueden tener efectos negativos en la relación. Y es que conciliar trabajo y familia es aún más costoso cuando existe la obligación de viajar asiduamente. Para combatir estos efectos la comunicación con tu familia es indispensable antes, durante y después del viaje. Además, a tu regreso, es aconsejable dedicar un tiempo extra a la vida familiar organizando algún plan especial.

Por redacción revista Travel Manager